El Champion de Chile "El Rodeo"

Entre Chamantos y Cueca

El Campeonato Nacional de Rodeo Chileno es la actividad con la cual culmina la temporada oficial de este deporte en la ciudad de Rancagua en el gran Champion de Chile, recinto especialmente construido para su práctica y que cuenta con capacidad para más de 13.000 espectadores.

Durante tres días, se concentra la tensión del Chile rural. Es que el rodeo hay que entenderlo como una competencia de destreza, pero también como una fiesta. Es un evento que convoca a familiares, amigos. No importa la condición o interés que cada uno tenga, todos pueden disfrutar de las diferentes atracciones que lo complementan, como lo son las domaduras, las exposiciones y remates de caballos, las ferias de artesanía, la exhibición de venta de aperos de huaso y los espectáculos artísticos.

Para acompañar como corresponde esta fiesta, la Medialuna Monumental ofrece un enorme patio de comidas, donde se puede degustar los platos típicos del país: cazuelas, asados, arrollados, plateada, pastel de choclo, humita y la infaltable empanada. Para refrescarse las opciones van desde mote con huesillo, terremoto, ponche y borgoña y toda la carta de los mejores vinos chilenos.

También encontrará un área donde se instalan los artesanos expertos en la confección de atuendos y aperos de huaso. Algunos de ellos como los fabricantes de chupallas, confeccionan en el mismo lugar los sombreros, mientras los visitantes eligen el suyo; mantas y chamantos de vistosos colores, brillantes espuelas, estribos y botas.

 

Ganadores del Champion de Chile (Cuarto Animal) 2014
Posición	Jinetes	Caballos	Asociación	Puntaje
1º	Juan Carlos Loaiza y Eduardo Tamayo	"Dulzura" y "Delicada"	Valdivia	38
2º	Gustavo Valdebenito y Luis Fernando Corvalán	"Compadre" y "Quiltralco"	Malleco	35
3º	Fernando Alcalde y José Quezada	"Maitencillo" y "Precio Mío"	Valdivia	30
4º	Jorge Ortega y José Luis Ortega	"Picardía" y "Pervertida"	Los Andes	29
5º	Alfredo Moreno y Luis Eduardo Cortés	"Canela" y "Pinturita"	Talca	27
6º	Felipe González y José Rojas	"Bacán" e "Hilvanada"	Litoral Central	24

El Movimiento a la Rienda

El reglamento del Rodeo Chileno establece que en todo rodeo oficial deberá realizarse esta competencia:

• Movimiento a la Rienda: El día domingo, antes de la serie final denominada "El Champion". Esta actividad, se hace en el sector de la medialuna conocido como cancha, jinete y cabalgadura serán sometidos a diferentes pruebas, que deben ser sorteadas en base a la pericia del jinete y a la docilidad y destreza del caballo.

El movimiento constituye un campeonato nacional igual al del rodeo y tiene las mismas etapas de clasificación que este. Asistir a este espectáculo es una interesante oportunidad para observar la habilidad que tiene el huaso para dominar su cabalgadura y logra con ella un armónico equilibrio alguna de las diferentes pruebas que la componen se denominan: La Troya, el Volapié y el Remolino y permiten calificar la presentación, la marcha el trote y el galope del caballo.

Volapié

El Sello de Raza

• El sello de raza premio creado para destacar los mejores ejemplares cuya estampa demuestra claramente la mayor pureza racial. Se busca con esto mantener la pureza del caballo chileno, que los expertos describen con cabeza de forma "acarnerada", crines abundantes, gruesas y ondeadas; bajo la alzada, de ancas dobles y caídas, casco pequeño y algo cerrado de talones

Jinetes de Ayer y Hoy (Historia)

La faena de un hábil jinete de rodeo puede hacer creer que eso de arrear y atajar un novillo es cosa fácil, pero es un error. Como también es un error pensar que el rodeo solo consiste en dirigir  y detener un animal. Un complejo reglamento norma tanto el aspecto técnico como el comportamiento en la medialuna y, para comprenderlo mejor, hay algo que saber de su historia y desarrollo.

En el tiempo de la Colonia, era común ver en la zona central de Chile donde el ganado se desplazaba entre valles cordilleranos y las tierras bajas, en busca de la abundancia de pastos. Estas faenas demandaban la participación de muchas personas, que se fueron haciendo cada vez más diestras en su oficio y que transmitieron sus conocimientos a las nuevas generaciones, creando la cultura del rodeo.

Un gran impulsor de esta actividad fue gobernador García Hurtado de Mendoza, quien lideró el proceso de conquista del territorio, en nombre de la corona española, en el ya lejano siglo XVI. Su formación como oficial de caballería y su admiración por el arte ecuestre moro, inspiraron tanto su decisión de ordenar que se efectuasen rodeos en la Plaza de Armas, como también la iniciativa de premiar a los jinetes más avezados en el adiestramiento de sus cabalgaduras.

El Cabildo de Santiago constituyó también a la consolidación del rodeo en el año 1527, al otorgarle carácter obligatorio a esta actividad y al exigir la utilización de cabalgaduras especialmente adiestrada para conducir el ganado a los diferentes corrales. Así, huaso y cabalgadura se formaron al mismo tiempo que nacía el rodeo, evento que se incorporó al patrimonio cultural de la nueva República.

Con el paso del tiempo, las actividades propias del rodeo se norman cada vez con mayor claridad, de modo que es posible apreciar la calidad de la faena, así como la conducción y destreza de las cabalgaduras.

Si bien originalmente la pista en la cual los huasos separaban el ganado era de forma rectangular, ya en 1860 presentaba la forma circular que es posible apreciar hasta hoy y que se conoce con el nombre de medialuna.

Otro hito importante en la historia del rodeo ocurrió en 1927, cuando se dictó la ley que reglamentó las corridas de vacas.

Se hizo obligatorio, la corrida de series exclusivas para reproductores de fina sangre chilena, lo que fortaleció la crianza de una raza caballar que presenta grandes virtudes, entre las que se destacan su inteligencia, mansedumbre y resistencia.

En 1946, un grupo de visionarios dio vida a la Asociación de Criadores de Caballares y se preocupó por reglamentar en forma clara y precisa la crianza del caballo de fina sangre chileno, así como controlar el rodeo chileno, difundirlo a lo largo del territorio nacional y efectuar los primeros campeonatos nacionales. Posteriormente en 1961, esta asociación impulso la fundación de la Federación del Rodeo Chileno, con objeto de lograr que el rodeo fuese un gran deporte nacional.