Trekking en las cumbres de Lonquimay, Llaima y Sierra Nevada en la IX Región de La Araucanía.

En la comuna de Curacautín, en La Araucanía, está el sendero El Coloradito, un trekking de 10,4 km por la Reserva Nacional Malalcahuello: son cuatro horas de caminata donde se rodea la cara suroriente del volcán Lonquimay, y lograr hermosas vistas de otros volcanes, y poder apreciar la fauna y bosques de la zona.

Zorro Culpeo

El Coloradito está a 85 km de Victoria, y para llegar hay que tomar la Ruta 181 hasta Malalcahuello. Desde este pueblo se debe continuar otros tres km hasta la intersección con la Ruta R-89, donde hay que seguir cinco km más y ahí encontrará la partida de la ruta.

Malalcahuello abarca 12.800 hectáreas. El nombre de esta Reserva significa "Corral de Caballos" en Pehuenche, y en el lugar viven comunidades indígenas. El punto de salida del sendero El Coloradito está en la guardería de CONAF, es un área protegida, muy cerca del Valle Corralco. Para no confundirse: en este mismo lugar está el comienzo del Sendero Sierra del Colorado estando en este lugar ya ubicado, hay que hacer un chequeo para confirmar si se cuenta con todo lo necesario en especial, agua. La dificultad del camino es media, el paseo no será corto y sobre todo en épocas de mayor temperatura es imprescindible mantener una buena hidratación.

Aquí comenzamos a caminar tomando rumbo al sur, y dirigirnos a un área de arenales volcánicos o dunas creadas por un antiguo aluvión del volcán Lonquimay. Después de recorrer un par de km se ingresa a un bosque donde se puede observar Ñirres, Lengas, Coigües y Araucarias. En esta zona los árboles son un espectáculo natural que reflejan las distintas estaciones del año. En especial el otoño, que junto a las puestas de sol, hace honor al nombre del sendero. Y en invierno, cuando la nieve cubre especialmente las araucarias. En verano la temperatura se hace notar y hay que cuidarse mientras se hace el trekking.

Por este camino se llega hasta un portezuelo que se cruza con el cajón de El Coloradito. Al llegar aquí ya se habrá hecho el tramo más duro de la travesía y ahora solo quedará bajar. Pero lo más importante será, en la cumbre, se pueden ver la forma de los volcanes Lonquimay, Llaima y Sierra Nevada y además de los bosques de araucarias.

Aquí es lugar perfecto para desconectarse, puede sentarse, relajarse (y hacer uso de su cámara para dejar registrado este lugar).

Al descender se ira encontrando antiguos escoriales, restos de actividad volcánica de la zona e ir escuchando el sonido de ave como el pájaro carpintero, chercán, rayaditos y con algo de suerte puede avistar un cóndor, además un par de cachañas y pitios y también podrán sentir la presencia del zorro culpeo.

Pasando los escoriales, el circuito continúa entre coirones y quilas hasta llegar al cruce con el sendero Piedra Santa. 

En este punto puede elegir entre dos opciones: tomar la ruta por el Sendero Piedra Santa y seguir en dirección sur hasta la guardería CONAF y aquí puede llegar al pueblo Malalcahuello o la otra opción continuar bajando por el sendero hasta la salida del sector de Huamachuco, que está a orillas de la carretera.

Lo más recomendable seguir a la guardería de la CONAF. Porque el camino está mejor señalizado.

Dificultad: Media (hasta con niños de 12).

Cómo Llegar: Desde Victoria por la Ruta 181 (Ruta Internacional Camino a Lonquimay) si viene del norte, o de Lautaro por la Ruta S-11-R.

Recomendable: En noviembre-diciembre y marzo-abril.