El Desierto Florido Chile

En medio de un paisaje desolado, la poesía se hace presente a través de flores de colores intensos que emergen desde una tierra árida y dormida. Es el fenómeno del Desierto Florido en el norte de Chile. 

Durante algunos meses el paisaje cambia radicalmente. Es cuando el desierto despierta y nos alucina con sus bellas flores que se mueven con el viento nortino y nos da una sensación de una gran "alfombra de flores", algunas únicas en el mundo, de diversos colores, tipos y cualidades, se van sumando a lo largo de la geografía, entre Vallenar y Copiapó.

La lluvia ocasional y la abundante nubosidad presente en la zona despierta y hacen germinar millones de semillas que por años han permanecidos secas en la arena. Se trata de especies herbáceas anuales y perennes. En las temporadas que no han caído lluvias, las semillas permanecen en latencia por un extenso periodo, que pueden llegar a alcanzar hasta los 10 años.

El desierto florido, un espectáculo natural cada cierto tiempo transforma la "escenografía" típica de la zona nortina.

La áridas superficies color arena cambian a una diversidad de colores. A lo largo de la carretera aparecen las especies maravillosas como terciopelos, punares, copas, don diego de la noche, añañucas y alstroemelias, a las que se agregan otras variedades de bulbos, prácticamente desconocidas.

A través del florecimiento, las distintas especies acumulan y asimilan energía; de esta forma se realiza la etapa de polinización, gracias a la cual las semillas nuevamente caen a la arena. Allí permanecen por otro largo periodo hasta que se presente la lluvia y vuelvan a brotar.

Este gran espectáculo se presenta de manera uniforme en distintos sectores del Desierto de Atacama. Uno de los principales escenarios se ubica en el kilómetro 773 de la Ruta 5, en las cercanías de Copiapó. Más al norte por la misma carretera, en el sector que une Copiapó con Bahía Inglesa, se lucen algunas variedades blancas de suspiros del campo, que provocan un efecto óptico. Su color parece indispensable para el paisaje y hace destacar los distintos tonos cafés y cobrizos de los cerros.

Una de las especias más codiciadas de la región es la Garra de León (Leontochir ovallei), una hermosa flor que nace de un bulbo enterrado.

El Desierto Florido se produce generalmente en la tercera región, pero puede llegar hasta la cuarta. Expertos señalan que es posible disfrutarle en el mes de Octubre; sin embrago algunas plantas resisten hasta fines de Diciembre.

Pata de guanaco, también llamada renillas (Calandrinia Longiscapa), de la familia de las portulaláceas.

Cartucho de flor de jote, también llamada terciopelo (Argylia Radiata), de la familia de las bignoniáceas.

Suspiro de campo (Nolana Paradoxa), de la familia de las nolanáceas.